Historia del Templo del Sol
- Construido en el siglo XV, este templo rendía homenaje a Inti, el dios del sol, central en el mundo espiritual inca. Sólo los sacerdotes y la élite podían entrar.
- Los historiadores creen que el espacio sirvió de observatorio y lugar ritual. Bajo ella se encuentra una cueva natural, apodada la Tumba Real. Algunos creen que el propio Pachacuti fue enterrado aquí.
- Se cree que este templo de granito estaba decorado con oro y plata, que fueron saqueados durante las invasiones españolas. Incluso hoy puedes ver las pequeñas fisuras y marcas donde esos preciosos adornos se adhirieron a la piedra.
Importancia cultural del templo
El sol era el dios más importante de los incas, conocido en el idioma quechua como Inti. Todo el ciclo de siembra, cosecha y mantenimiento de la vida en el imperio giraba en torno a él. Su esposa era la luna (Killa), y se creía que su hijo era el propio emperador inca, cuyo estatus divino se reforzaba a través de esta conexión sagrada.
Más que una maravilla arquitectónica, el Templo del Sol es un símbolo en directo de esta visión del mundo. Sus alineaciones, rituales y presencia en Machu Picchu reflejan el profundo vínculo espiritual de los incas con el sol y los ritmos de la naturaleza, una relación que dio forma a todos los estratos de su sociedad. Más allá de esta ciudadela, los incas honraron a Inti con otros grandes santuarios, el más famoso de los cuales es el Coricancha de Cuzco, antaño revestido de láminas de oro y considerado el templo más importante del imperio.